A mi padre
A mi hijo
MI HIJO Y EL MAR
Ahí duerme mi hijo
y yo le miro desde el mar,
dentro del mar.
A un paso de mi mano, frente al mar.
Nado a su encuentro
fundida con el mar.
Distingo su balcón de blancos filos,
abanicado por palmeras.
Voló,
y fue a posarse al borde mismo de una isla.
Se quedó
mirando al mar.
Me sumerjo y emerjo para verle desde el agua.
Olas golpean mi espalda y
el agua me permite ingravidez.
Y se me antoja
que el mar fuera su padre
que el mar fuera su padre
y llegara al mar mi hijo
en busca de respuestas
que le diera el mar.
Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto y foto)