VEN, PASA SIN LLAMAR


MENSAJE Y CANCIÓN DE BIENVENIDA AL BLOG
(Pinchar sobre el texto que sigue, para escuchar la canción):
VEN,
PASA SIN LLAMAR
(*) Vídeo de la CANCIÓN: pinchando en cualquier parte del texto de bienvenida anterior (Le puso música y voz: Amador (Dorchy Muñoz) Gracias.

*Tanto los TEXTOS como las FOTOS de cada entrada del Blog son autoría de Ángeles Fernangómez. En algún caso excepcional en que no fuera así, siempre se especifica el nombre del autor o autora y se cuenta con su consentimiento.


miércoles, 5 de diciembre de 2012

ASÍ TUVO QUE SER


(2010)

ASÍ TUVO QUE SER

 Tuvo que ser así.
Tuvo que ser que se nos acabaran los surtidores
cuando aún teníamos líquidos para sentirnos vivos;
desaparecieran los pavos reales antes que el tacto de sus plumas;
disolverse el apetito, mientras rebosaba la despensa todavía;
quedarnos sin pulmones cuando aún teníamos aire.

Tuve que juntarme con Rimbaud para vivir a tope y acabar temprano la partida.
Tuvo que ser que me dieras un regalo que regar para después de tu muerte.
Tuvo que ser la noche.
La noche… y un vaso sobre la mesa, con el que alimentabas
 la tristeza miope de tus ojos, taladrando el humo hacia los míos, y que yo
confundiera caricias con carencias, libertad con otro modelo de barrotes,
abandonando mi yo para hacerle un TAC a tu conciencia
y auscultar cada mañana el daño que te infectó la diminuta piel del alma.
Tuvo que ser que cantáramos a gritos cuando ya no quedaban sonidos en el 
                                                                                                           [mundo.
Así tuvo que ser, para que hoy me reconozca en cada paso.

Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto y foto)

martes, 11 de septiembre de 2012

GUARDARÉ TU RISA (a Cristina Rojo)

Zona "Fuego" en La Lobera de Gredos, donde Cristina dirigió una especie de conjuro, y en él gritaba: ¡ fueraaaaa ! 

(2012)
GUARDARÉ TU RISA
A Cristina Rojo
Hago memoria:
¿dónde fue que te vi por vez primera?
¿dónde contemplé tus rizos negros, risueña bruja de los vientos?
No ubico nuestro primer cruce de miradas,
pero sé que había poesía en el choque inicial de nuestros ojos.
¿Qué nos unió sino la rama fértil del poema?
Reír es tu forma de Amar, amiga.
Luego,  llegó el paisaje, tintado de lírica y de notas.
Y soplamos estrofas a la cordillera.
Ritos a fuego abierto en el otoño,
asida por las manos la manada
      de poetas-lobos.
Y tú: ¡fueraaaaaa!
E invocabas a la Tierra
¡Fuera!
Y conjurabas al Viento
¡Fuera, fuera, fuera todo aquello que no nazca y sea!
Y avivabas con tu chispa la del Fuego.
Cuando invocaste al Agua, las nubes te escucharon, bruja:
(¿alguna vez te dije que eres mi bruja preferida?)
Tú me elevaste a Reina Celta, luchadora en Anglia.
Sacaré toda la fuerza de mi pelo rojo,
seré la Boadicea que me hiciste ser: juro que te entregaré a la mano la victoria.
Y guardaré tu risa en un cajón de plata.
Reír es tu forma de Llorar, hermana.

NOTA: la primera vez que Cristina vino a los encuentros poéticos de La Lobera de Gredos, recuerdo que me dijo: "me recuerdas a la reina celta Boadicea, en todo".


Dibujo del poeta ENRIQUE GRACIA TRINIDAD
Gracias, Maestro(en mi nombre y en el de Cristina)


ABRAZADAS, y ABRAZADAS A LA GRAN SABINA
(septiembre 2012)




 Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto)  y Santiago Carrasco (fotos)

viernes, 31 de agosto de 2012

LA HORA DE LOS NAIPES


 (2012)

LA HORA DE LOS NAIPES 
                                                                                          A Eduardo

Cómo alcanzar el cabo de este ovillo.
Cómo erguirme y escapar de la cárcel que me tejo,
si no se va esta angustia, si no cede,
si el dolor oprime todas mis fronteras.

Escapé: no hay sombra

Volví: falta la luz

Tomé el pincel:  se nublan los colores

Ya recorrí a oscuras el pasillo, y ahora…
me derrumbo en esta cama, empapada
del llanto de mis poros, de mi llanto. Ay,
que no declina, no, que me estrangula, que me asfixia. Me taladra
como una línea gris directo a los cipreses.

Apagué el teléfono:
no quiero oír la voz de las demandas.
¿Cuántas veces así, para mañana siempre?
Llegó la noche a las ventanas:  ahora,
ya se igualó la calle con mis sienes;
no hay adverbio de lugar que me socorra.
no hay Madrid ni Toledo que calmen.
                                               ¿Dónde el punto de fuga de este cuadro triste?

El sinfín, el no retorno, ¿quién impuso el castigo
de ganarse la vida, embrutecerse?
Mis deseos solo alcanzan a mis lienzos, a mis libros,
la enciclopedia y una lámpara:
absorber
lo aprendido por  los hombres y los años.

También necesito de una madre, pero es tarde,

tengo que acallar mi pálpito, salir
de este embudo oscuro en que no quepo, silenciarme.
Ya cubren los naipes el tapete:
sólo sentiré un frío tremendo en mi garganta.
Tal vez, ni oiga el ruido estrepitoso de La Nada.


Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto y foto)

jueves, 9 de agosto de 2012

LOS VERSOS DE MESTRE

En el Recital "VERSOS PARA UN BOSQUE MÁGICO" en el HAYEDO DE BUSMAYOR (El Bierzo - León), el 4 de agosto de 2012.
Este poema fue dedicado a Juan Carlos Mestre, ya que unos versos del poeta inspiraron un día mi poema.


(2005)

                            LOS VERSOS DE MESTRE

Cada amor que termina 
es un cementerio de abrazos
Juan Carlos Mestre (de "Cavalo Morto")


Los versos,
la frase que me llevé  puesta.
Me quedó colgada de entre los sentidos.
Pegada.
No supe evitarlo,
¿quería?
El poeta Mestre me daba la noche:
Invierno. Acordeón en música de versos:
  "Cada amor que termina
 es un cementerio de abrazos",  
recita
                       me canta                     
  sentencia
   golpea
     declama….
                       
 ¡Me estampa en la cara!

Marcho. Pienso en los muertos.
                Me duelen los brazos, el pecho se hunde...,  pesa.                   Me quemo.
Corro a buscar flores. En la noche.
¡Corro!
 Pienso azucenas.

Una estrelitzia para aquel tan fuerte.
Al de aquella tarde en que ya no te esperaba, la flor del azahar.
El brezo blanco para el que me supo a miel con leche,
(no, magnolias; mejor que sean magnolias).
Amapolas, también pondré amapolas.
Calas blancas –una es suficiente-, se la daré
al que me subió hasta el cielo aquella noche.
Rosas. Rosas rosa, como a mí me gustan.
Esas...,  al que duró tanto, tanto...
La flor del geranio rojo, jazmines, madreselvas...

Tristes de pétalos los ojos,
flores para las tumbas.
Abrazos floridos
Abrazos muertos
Crisantemos para el amor.


Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto 
Vídeo: Santiago Carrasco

sábado, 9 de junio de 2012

BONDAD

(2012)
BONDAD
Soy, en el buen sentido de la palabra, bueno.
(De “Retrato”- A. Machado)


He de confesar que, en ocasiones,
quise ser malísima, muy mala.
Tan mala
que el mundo temiera mi presencia
y mis uñas rojo garfio.
Tan mala
que escupiera bichos por mis labios.

Tantos días…
Tanta vida…
ensayándome en bondades y respetos, ¿para qué?

Cansada me he sentido de que el necio
confunda al bueno con el tonto,
al sensible o dulce con el débil,
a quien respeta con quien no tiene criterio,
o a no discernir entre hipocresía y “mano izquierda”.

Cansada estoy, sí,
harta –diría–, pero…
¿saben qué les digo?: que no cambio, que no cambien,
porque aprender a plantarse sin herir
es todo un arte,
y el verdaderamente estúpido es aquel que no distingue
el inconfundible aroma que desprende la bondad .

Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto y foto

sábado, 5 de mayo de 2012

DÍA DE LA MADRE (domingo, 6 mayo 2012)

Agradezco a la vida que me esté permitiendo disfrutar de una madre íntegra, a pesar de sus 92 años cumplidos.

Su amor a la lectura está siendo más satisfecho que nunca (nunca pudo leer tanto, no tenía tiempo, pero ahora... al menos un libro a la semana... cae).

Su salud mental es perfecta, y la física es muy, muy aceptable para su edad. 

En diciembre pasado, cuando cumplió sus 92 años, le regalé esta foto junto con el pequeño poema que dentro le dediqué. 

¡GRACIAS, MADRE!

Los ojos de mi madre
huelen a mar de norte, a noche celta.
La vida de mi madre
sabe a trabajo, a hijos, a amor, a pueblo...
¡a Vida!


Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto y foto) 


miércoles, 25 de abril de 2012

SOY (poema a modo de carta de presentación)



SOY
 (2012)
Lloro a la yerba rota en julio para que rumie el invierno,
y me duelen los golpes secos del verano sobre el corazón de las moscas.
Mi gente se sentaba en el filo de una hierba para ver nacer a la espiga.
Mi padre nunca fumó, pero murió con los pulmones negros, y ahora tengo un hijo con el que apenas hablo de estas cosas.
Soy hija del carbón y de la tierra, y me tuteo con la nieve y con el río.

Al caer la tarde entregaban las cabras sus ubres a los hombres, y todas las madres se santiguaban al toque del ángelus.
Ay, si los caños pudieran girar un tanto así la vista…
Ay los mineros cómo tardan esta noche en regresar, será que a la tierra no le gusta que le muerdan las entrañas y hunde su miseria.

Sonrío por ti, abuela que apenas conocí, pero supe que eras tierna.
Río la algarabía de los niños al recreo soleado y saco el cabás guardado en el recuerdo.
Soy hija del roble y del nogal gigante.

Mis padres construyeron una casa piedra a piedra con sus manos.
Después, plantaron enredaderas para escalarla, y se retiraron a contemplar el crecimiento de sus hijos.
Algunas tardes veo pasar la lluvia y el argayo por delante de mi puerta. Entonces, tomo de mis ojos una pala y lo retiro.
Y soy lluvia, carbón, hierba y yerba, enredadera, mujer de nieve, piedra…
Soy la que se sienta sobre unas trébedes a contemplar el estallido del fuego. La que canta romances y aún puede dormir al arrullo de una nana, la amiga del viento, la que susurra a los gatos, y a la que le nacen senderos por la carne.
Soy la que fui y la que se fue haciendo. La herencia de los hijos de la tierra... Soy.

Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto y foto) 

lunes, 23 de abril de 2012

ESTA ES LA LEYENDA



ESTA ES LA LEYENDA...
(2005) 
Esta es la leyenda de un escritor
que contó todas las historias, menos una:
la que le hubiera dejado sin secretos.

Esta es la leyenda de un poeta
que cantó a todos los dioses,
pero nunca creyó en ellos.

Esta es la leyenda de un lector
que vivió todas las vidas donadas por los libros
pero olvidó quién era.

Esta es la leyenda de un libro
que contó la historia de una casa que no daba al mar,
pero al leerlo al borde de las olas
le nacieron barcos en el jardín.



Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto y foto) 

viernes, 13 de abril de 2012

CUANDO NIÑA


Cuando niña                                                                                                (2009)
pensaba que el mundo era
un nogal a la orilla de mi casa,
flotando
en un poblado con entrañas de carbón.

Después
supe que  los límites del mundo
nunca rozarían
las yemas de mis dedos.
Y olvidé el nogal,
la casa,
y el poblado.

Ahora sé que mi mundo es
un poblado con carbón en las entrañas,
en el que hay una casa,
varada,
a la sombra de un nogal.


Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto y foto) 

lunes, 19 de marzo de 2012

NO FUMES


EN EL DÍA DEL PADRE

  (2010) 
A mi padre

No fumes,                                                                            
-me dice mi padre desde el subsuelo-,
yo tuve pulmones de carbón que ya no inhalan.

La mañana de pasos subterráneos
me lleva y me descarga en la rutina.
Vierto monóxido que mastico por la calle
y le digo a mi padre que también yo
vivo en una mina que me engaña con estrellas.
Sus huesos me sonríen,
pero yo siento unos brazos de piel que me rodean
y unas palabras lentas y precisas me perforan.
Se cubre su sonrisa de labios que hizo míos, y le digo:
mañana empiezo el régimen, no temas,
                                                          duérmete.



Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto y foto) 



domingo, 11 de marzo de 2012

"11-M " : Ellos, en el corazón

11-M 2004


...el grito de la muerte resonando
por los caminos de hierro del destrozo humano.

(de mi poema "Sólo dos meses")

Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto y foto)  

miércoles, 7 de marzo de 2012

8 de marzo = MUJER


TAL VEZ, COMPRENDIENDO MEJOR LA NATURALEZA MÁS ÍNTIMA DE LA MUJER, PODAMOS COMPRENDERLA MEJOR EN TODOS LOS ASPECTOS.
 Y RESPETARLA
Gracias
MUJER                                                                                                                 (2007)

No es sólo el cuerpo de un David
lo que conquista el sexo de una mujer libre,
no basta una nariz perfecta,
ni ojos traslúcidos o de brillantez opaca.
Ni brazos robustos simplemente ansía.
No va con cintas de medir la mujer cuando se entrega,
ni tiene prisa en el clímax que no apura.
La explosión del sexo es, para ella, el camino y no la meta,
una línea curvada y plena de espirales,
mil trazos marcados con las yemas de los dedos,
palabras en las que descubrir
la sensibilidad oscura de los hombres.
Busca, sí, busca  palabras,
palabras de ida y vuelta,
palabras recorriendo la sintaxis de la comunicación perfecta.
Busca que admire el hombre
sus pechos entregados, sin medirlos,
su mente singular y valerosa,
que el hombre sepa comprenderla
y compartirla cuando llora
y enseñarle a llorar cuando proceda.
Entonces, la piel de la mujer es piel del hombre
y el sexo cobra mil maneras.
Entonces, ella siente esos temblores
del enredo de la piel y el intelecto
y proclama el placer de los sentidos
por sí misma
y por aquellas madres que nunca lo sintieron.



Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto)
FOTOSantiago Carrasco  

domingo, 4 de marzo de 2012

Vídeo-Poema "REMOLINOS DE AMOR" (del Recital "Poesía en Sidecar")

Recitado en LIBERTAD 8 / "POESÍA EN SIDECAR" (1.3.2012)
REMOLINOS DE AMOR
                                                                                                                                         (2004)
Orvalla miel desde tu boca a la mía
y me endulza, de tanto amor
que no me cabe,
que me rezuma, uno a uno, en cada poro
y te devuelve el sabor que me llovías.
Nacen sedas
en las yemas de tus dedos,
brota el mar
y nos moja de perfumes.
Madruga tu boca
a recorrer mi espalda
del beso que me pones en el hombro
y que alargas
                y dibujas
                               y circulas
                                               y humedeces
                                                                        y entretienes
                                                                                                y regresas...

Morir un poco no me importa
si es el más allá de tus caricias
lo que encuentro,
si es tu daga amante
la que me penetra en el gemido
y me enreda en tu mismo remolino
de vértigo de luz, a toda vela,
devolviéndome a la vida, sana y salva
y, si cabe, con más fuerza.


Todos los derechos©Ángeles Fernangómez (texto)
VÍDEO y FOTOS: Santiago Carrasco